La mítica banda pionera del heavy metal se llamaba así por una película italiana de terror
Ozzy Osbourne, el rockero de Black Sabbath, se declaraba cristiano, creía en Dios y negaba hacer magia negra, tuvo problemas de adicciones y relaciones
Ozzy Osbourne, un pionero del heavy metal y cofundador de la mítica banda Black Sabbath, ha muerto este martes 22 de julio con 76 años, según un comunicado de su familia. "Estaba con su familia, rodeado de mucho cariño. Pedimos a todos que respeten la privacidad de nuestra familia en este momento", dice el comunicado.
No se especifica la causa de su muerte pero padecía Parkinson y problemas graves de espalda y llevaba años compaginando terapia y actividades musicales. Unos días antes de morir organizó un concierto con sabor de despedida titulado "Regreso al Origen de Sabbath".
Black Sabbath: homenaje al género de terror
Su nombre real era John Michael Osbourne y nació en Birmingham, Inglaterra, en una familia de clase obrera. Ganó fama mundial con la banda de rock heavy Black Sabbath, que algunos consideran la formación que estableció los cánones estéticos del heavy metal. La banda se llamaba así por la película de terror italiana del mismo nombre de 1963 y desde el principio el grupo quiso explorar la fascinación del público por lo terrorífico.
Dejó Black Sabbath en 1979 y consiguió enfilar una exitosa carrera en solitario, produciendo temas icónicos como "Crazy Train" y "Mr. Crowley" (en referencia al famoso ocultista inglés Aleister Crowley). Un público más joven le conoció al inicio del siglo XXI por el reality show The Osbournes.
Tuvo 3 hijos con su primera esposa (se divorciaron tras 11 años) y otros tres con la segunda, Sharon. Tuvo muchos problemas con las drogas y el alcohol de joven, y también menos joven. Parece que sólo en 2006 se convenció de que podía componer música sin recurrir a sustancias nocivas.
"Soy cristiano, creo en Dios, pero no voy a la iglesia"
Black Sabbath y su escenografía de heavy metal teatralizaban muchas alusiones escénicas sobre ocultismo y magia. Pero en diversas entrevistas Osbourne negó siempre ser satanista u ocultista, y se definía más bien como un cristiano que no iba a la Iglesia, aunque creía en Dios a su manera.
"Soy cristiano. Me bautizaron como cristiano. Yo iba a la escuela dominical", recogía The Guardian en 2014, a partir de entrevistas anteriores.
También declaró en 1992 al New York Times que era "miembro practicante de la Iglesia de Inglaterra" y que rezaba antes de cada concierto. Pero ese mismo año de 1992 dijo en otra entrevista: "Creo en Dios. No voy a la iglesia, pero no creo que sea necesario ir a la iglesia para creer en Dios", dijo. (La entrevista es de 1992, pero se difundió en la revista Audacy en 2015).
Muchos señalan que las letras de canciones y la imagen teatral de Osbourne no encajaban bien con el cristianismo. Otros apuntan que formaría parte de las fantasías del espectáculo, especialmente ligadas al género de terror y su estética.
"Nunca he hecho magia negra"
En otra ocasión declaró a la prensa: "No soy un demonio. Nunca he practicado la magia negra".
The Guardian también citó otras declaraciones de 1986 de Osbourne (cuando tenía 34 años) cuando dijo: "Soy cristiano. Me bautizaron como cristiano. Solía ir a la escuela dominical. Nunca me interesé mucho en eso porque... bueno, porque no".
Respecto a la idea del Cielo, dijo a esa edad: «Mi idea del Cielo es sentirme bien. Un lugar donde las personas se llevan bien entre sí. Este mundo me aterra. Todos vivimos en el polvorín».
Osbourne también dijo que desde que tuvo hijos, se preguntó qué les quedaría y "qué futuro tenemos para la humanidad".
Según el Daily Mirror, la esposa de Ozzy, Sharon Osbourne, declaró que en su último concierto Ozzy se esforzó mucho pensando en sus fans. "Lo más importante para Ozzy son sus fans, así que se esfuerza mucho para estar listo para ellos, para que este concierto sea la manera perfecta de terminar la historia", declaró Sharon.
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