Una inesperada ayuda navideña para los necesitados
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| El padre Thomas Conway del santuario de San Antonio de Boston al cobrar el boleto de lotería |
P.J.G./ReL 24 diciembre 2016
En Boston hay un santuario franciscano dedicado a San Antonio de Padua (stanthonyshrine.org) donde sucedió algo peculiar el pasado 10 de diciembre. Un hombre telefoneó al santuario para decir que había ganado 100.000 dólares en la lotería de Massachusetts (95.800 euros, o 16 millones de pesetas) y que quería entregar el boleto al santuario.
“No quería restringir el donativo de ninguna manera y no quería que su nombre figurase. El lunes [19 de diciembre] nos trajo el boleto. Ese mismo día lo llevamos a la Oficina de Lotería de Massachussetts y recibimos el cheque para el santuario”, explicó a la prensa el padre Thomas Conway, director del templo.
La encargada de atender a la llamada, Maryanne Rooney-Hegan, explicó como fue esa conversación: “Dijo: ‘son cien mil dólares y me gustaría que ustedes lo tuviesen, especialmente en este momento del año sé que pueden usarlo’. Yo me quedé aturdida, como poco. Pensé: ‘Dios mío, qué alma tan buena. Tiene un corazón mayor que un parque’. Y después me puse a llorar”.
El padre Conway describió la peculiar escena de la recogida del dinero en la oficina de la lotería. “Ahí estaba yo con mi hábito franciscano y un boleto de cien mil dólares y todos a mi alrededor cobrando en efectivo cantidades más pequeñas”, comenta entre risas. “Lo gracioso es que no es el tipo de cosas para las que te preparan en el seminario, pero son cosas que pasan”.
En realidad se cobraron 70.000 y el Estado se quedó 30.000 dólares en impuestos.
“El donante no pidió nada del premio para él, sino que dijo sólo ‘es vuestro, solo os lo quiero dar a vosotros’; es algo destacable”, comenta el franciscano.
“No quería restringir el donativo de ninguna manera y no quería que su nombre figurase. El lunes [19 de diciembre] nos trajo el boleto. Ese mismo día lo llevamos a la Oficina de Lotería de Massachussetts y recibimos el cheque para el santuario”, explicó a la prensa el padre Thomas Conway, director del templo.
La encargada de atender a la llamada, Maryanne Rooney-Hegan, explicó como fue esa conversación: “Dijo: ‘son cien mil dólares y me gustaría que ustedes lo tuviesen, especialmente en este momento del año sé que pueden usarlo’. Yo me quedé aturdida, como poco. Pensé: ‘Dios mío, qué alma tan buena. Tiene un corazón mayor que un parque’. Y después me puse a llorar”.
El padre Conway describió la peculiar escena de la recogida del dinero en la oficina de la lotería. “Ahí estaba yo con mi hábito franciscano y un boleto de cien mil dólares y todos a mi alrededor cobrando en efectivo cantidades más pequeñas”, comenta entre risas. “Lo gracioso es que no es el tipo de cosas para las que te preparan en el seminario, pero son cosas que pasan”.
En realidad se cobraron 70.000 y el Estado se quedó 30.000 dólares en impuestos.
“El donante no pidió nada del premio para él, sino que dijo sólo ‘es vuestro, solo os lo quiero dar a vosotros’; es algo destacable”, comenta el franciscano.
El santuario de San Antonio está dedicado a un santo famoso por sus milagros,
no recibe nada del obispado y se mantiene solo con donativos. Sus
servicios de culto y, sobre todo, su multitud de servicios sociales, le
cuestan 12.000 dólares al día que se pagan gracias a una infinidad de
donantes. La mayoría de donativos llegan en Navidad y sirven para todo
el año.
Con este dinero en concreto se financiarán:
- la fiesta para veteranos de guerra pobres de después de Navidad
- los regalos para los niños de familias necesitadas
- las comidas de esta temporada para las 500 familias que dependen de la caridad del santuario
- el sueldo de los músicos que participarán en los 14 servicios navideños de este fin de semana
Y más actividades.
El santuario cuenta también con servicios de acompañamiento en el duelo, asesoría sobre adicciones, programas para ancianos en apuros, centros de recuperación del alcoholismo y otras acciones. El santuario tiene casi 70 años de historia de servicio a los necesitados. Ha visto muchos actos de generosidad y servicio, pero este ha sido de los más peculiares.
Con este dinero en concreto se financiarán:
- la fiesta para veteranos de guerra pobres de después de Navidad
- los regalos para los niños de familias necesitadas
- las comidas de esta temporada para las 500 familias que dependen de la caridad del santuario
- el sueldo de los músicos que participarán en los 14 servicios navideños de este fin de semana
Y más actividades.
El santuario cuenta también con servicios de acompañamiento en el duelo, asesoría sobre adicciones, programas para ancianos en apuros, centros de recuperación del alcoholismo y otras acciones. El santuario tiene casi 70 años de historia de servicio a los necesitados. Ha visto muchos actos de generosidad y servicio, pero este ha sido de los más peculiares.
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