En los saludos el Papa recuerda que la belleza siempre nos acerca a Dios
El cuadro de la Madonna del Miracolo va a la basílica de San Pedro |
(ZENIT – Ciudad del Vaticano).- El santo padre Francisco al concluir
la catequesis de los miércoles saludó a los peregrinos procedentes de
diversos países.
Entre los varios grupos estaba el de la iglesia romana de Sant’Andrea delle Fratte, llegados con el cuadro original de la Virgen Milagrosa, o Madonna del Miracolo, que se expone en la basílica de San Pedro hasta el primero de enero. El motivo son los 175 años de la conversión de Alfonso Rastisbonne, en 1842, tras la aparición que tuvo de María en un altar lateral de dicho templo.
El abogado Ratisbonne (1812-1884), banquero muy rico, de religión
judía pero libertino, despreciaba particularmente a la Iglesia Católica y
al clero. Resentía que su hermano Teodoro se había convertido y
ordenado sacerdote. Su conversión tuvo gran impacto en la época
influenciada por el racionalismo, que rechaza las realidades
espirituales. En 1847 Alfonso Ratisbonne fue ordenado sacerdote jesuita.
Siempre con el cuadro de la Madonna del Miracolo, pintado poco después del prodigio por el artista Natale Carta, se rezará el viernes 30 por la tarde las Vísperas, el sábado 31 el Te Deum
presidido por el papa Francisco delante del cuadro de María que será
entronizado en el Altar de la confesión. Y el domingo 1° de enero la
imagen estará en la misa de año nuevo que celebra el Santo Padre.
Después el cuadro regresará a la iglesia donde siempre está expuesto.
De otro lado, al saludar a los artistas y técnicos del Golden Circus
de Liana Orfei que hicieron unos números de acrobacia y prestidigitación
en el Aula Pablo VI, Francisco aseguró que “la belleza siempre nos
acerca a Dios”.
También dirigió un saludo especial a los jóvenes, a los enfermos y a
los recién casados. “Yo les llamo valientes –afirmó– porque hace falta
valor para casarse y para hacerlo para toda la vida: ¡Muy bien!”.
Luego añadió. “Los santos inocentes mártires que recordamos hoy, nos
ayuden a todos a ser fuertes en la fe mirando al Niño divino que en el
misterio de Navidad se ofrece por la humanidad entera. Queridos jóvenes,
crezcan también ustedes como él: obedientes a los padres y dispuestos a
entender y a seguir la voluntad del Padre que está en los cielos.
A los enfermos les dijo: “deseo que vislumbren en la resplandeciente
luz de Belén, el sentido de vuestros sufrimientos. Y les exhorto a
queridos y valientes recién casados, a mantener constante, a la hora de
construir vuestra familia, el amor y la entrega más allá de cualquier
sacrificio y a que nunca terminen el día sin haber hecho las paces”.
in
Sem comentários:
Enviar um comentário