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terça-feira, 31 de maio de 2022

La voluntaria y madre ucraniana que reza con el Papa el rosario por la paz: orar acogiendo

Oksana colabora como voluntaria con la parroquia ucraniana de Roma, con envíos y refugiados


Oksana con su esposo e hijos - desde la parroquia ucraniana de Roma ha colaborado con la acogida de refugiados y el envío de ayuda
Oksana con su esposo e hijos - desde la parroquia ucraniana de Roma ha colaborado con la acogida de refugiados y el envío de ayuda

P.J.G.

En la última tarde de mayo, el Papa Francisco rezará el Rosario por la paz en el mundo junto a la imagen de María, Reina de la Paz, en la iglesia de Santa María la Mayor. La imagen la encargó Benedicto XV durante la Primera Guerra Mundial.

El Papa hará mención a la guerra de Ucrania, que está en su día número 97. La Fiscalía ucraniana calcula a 31 de mayo que esta guerra ha matado a 243 niños y ha herido a 446, algunos de los cuales se recuperan en el hospital infantil del Papa, el Gemelli. A 26 de mayo, tras 3 meses de combates, un informe de Naciones Unidas (OHCHR) calculaba (a la baja, con regiones enteras sin investigar) que la guerra había causado la muerte de 4.000 civiles y herido a otros 4.700 civiles. Nadie da cifras fiables de soldados muertos, pero parece casi seguro que han superado los 25.000 entre los de ambos bandos.

Con el Papa, rezará el rosario Oksana Boyko, una madre de familia de 40 años, de Ucrania occidental, que colabora como voluntaria con la parroquia ucraniana católica de Roma, la de Santa Sofía.

Oksana ha contado su situación a Antonella Palermo, de VaticanNews, aprovechando un rato en que dos de sus 4 hijos (el mayor tiene 10 años; el menor, dos) están en unas actividades para niños organizadas en la parroquia ucraniana por la Comunidad de San Egidio. Sus hijos también acudirán al rezo con el Papa.

Oksana, natural de Brody (a cien km de Leópolis) llegó a Roma en 2008 para estudiar en la Universidad Pontificia Angelicum. Ya era licenciada en Economía y había trabajado en una entidad pública.

Empezó la guerra. Su hermana escapó de Kiev inmediatamente con sus 4 hijos. Pero sus padres se quedaron en casa.

"Cuando Don Marco, el párroco de Santa Sofía, me pidió que participara con el Papa", cuenta, "al principio tuve un poco de miedo, pensé en los dos niños más pequeños, un poco díscolos e inquietos... Pero entiendo la importancia de este evento. La guerra debería desaparecer de la tierra y nunca puede considerarse justa. Espero que esta oración podrá ayudarnos a salir de esta guerra atroz, para que el mismo concepto de guerra desaparezca", exclama.

Una familia con fe mariana

Oksana explica a sus hijos que la Virgen María es "una mujer que dijo sí a la propuesta de Dios y se convirtió en madre de todos nosotros. Nací en una familia creyente y desde mi infancia, el mes de mayo era el mes mariano por excelencia. Todavía recuerdo las canciones que cantábamos con mi abuela, que era muy devota. Solíamos ir al santuario de Zarvanytsia y conozco muchos otros", explica. Zarvanytsia es un popular santuario greco-católico en Ucrania, uno de los que se conectará online con el Papa para el rezo del final de mayo por la paz.

"Un gran sueño para mí sería visitar Lourdes. Cuando asistía al Angelicum, todas las mañanas, a las 12, iba a misa en la basílica de Santa María la Mayor. Estar con María es algo muy natural para mí", explica Oksana.

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María Reina de la Paz, la imagen de la Primera Guerra Mundial en Santa María la Mayor ante la que el Papa reza por la paz la tarde el 31 de mayo de 2022.

Primero, clasificar ayudas; luego, escuchar

En la parroquia ucraniana de Roma, todos hacen lo que pueden por acoger refugiados y enviar ayuda. "Durante noventa días he estado aquí clasificando las ayudas. Luego empezaron a llegar los primeros refugiados. Lamento usar esta palabra 'refugiados', no puedo creerlo", reconoce Oksana. A menudo son madres jóvenes con hijos, dejando a los padres en la guerra. Cuando la familia es numerosa, el Estado permite al padre ir al extranjero con la madre y los hijos.

Oksana aprendió que además de ofrecerles comida e información podía ofrecerles su disponibilidad para escuchar y tranquilizar. "Les decía: 'llámenos, incluso a altas horas de la noche, si nos necesita'. Santa Sofía se convirtió en un trozo de tierra ucraniana en suelo romano, también un trozo de mundo".

"Al principio pasaba por la parroquia para encontrar la mirada de Jesús y María en los iconos y pedirles que me ayudaran a no equivocarme", confiesa Oksana. "Muchos quieren ayudar, pero incluso con esta intención pueden cometer errores". Explica que esto puede ocurrir, por ejemplo, cuando se da información errónea y se crean expectativas equivocadas.

Muchos refugiados, en una semana, se convertían en voluntarios

Ella afirma que se necesita ternura con los que han dejado todo bajo las bombas. "Algunos querían contar toda su historia, pero no teníamos tiempo para escuchar. Así que nos organizamos con nuestra psicóloga ucraniana, que siempre está llena de citas". En marzo, había 500 voluntarios que venían cada día a ayudar, "siempre diferentes, de todos los colores de piel". La gente venía aquí y preguntaba: ¿qué puedo hacer? Y nosotros ni siquiera lográbamos manejar esta situación. Hoy quiero dar las gracias a todos. Nuestros hijos solían venir aquí después de la escuela. Los refugiados tenían miedo, desconfiaban. Lo que más me sorprendió fue que los refugiados, una semana después de su llegada, ya se convertían en voluntarios. Sembrar el bien que al cabo de las semanas se convertía en otro bien. Un multiplicador. "Lo que vi", observa Oksana, "es que en cada persona hay una voluntad natural de hacer el bien".

La parroquia ucraniana tiene dos sacerdotes e infinitas tareas que hacer con los refugiados. La familia de Oksana, que rezaba el Rosario varias veces por semana al principio de la guerra, ha visto como la actividad incesante absorbía bastantes de estos momentos. Ahora la oración se encarna en la acogida y la escucha.

"Cuando estaba embarazada de cada uno de mis hijos, compré un rosario que rezaba durante el embarazo. Ahora saben que cada uno tiene su propio rosario", cuenta.

Y recuerda que, a pesar de la guerra y del riesgo de ser bombardeados, los ucranianos siguen acudiendo a los santuarios, mostrando la fuerza de su fe. 

Una oración especial por la paz

En ese encuentro de oración, el Papa se acompañará de representantes de la comunidad cristiana de Roma:

- jóvenes scouts,
- familias de la comunidad ucraniana de Roma (la de Oksana)
- representantes de la Juventud Ardiente Mariana,
- miembros del cuerpo de Gendarmería Vaticana y de la Guardia Suiza Pontificia
- feligreses de parroquias romanas dedicadas a la Virgen María Reina de la Paz
- algunos miembros de la Curia Romana.
- capellanes militares

Se han comprometido a participar en esta oración santuarios marianos internacionales y santuarios de países en guerra o en grave inestabilidad, que conectarán online para rezar todos juntos.

Estos son los santuarios marianos que adherirán a la oración:

- Santuario de la Madre de Dios (Zarvanytsia) en Ucrania
- Catedral de Sayidat al-Najat (Nuestra Señora de la Salvación) en Irak
- Catedral Nuestra Señora de la Paz en Siria
- Catedral de María Reina de Arabia en Baréin
- Santuario de Nuestra Señora de la Paz y del Buen Viaje
- Santuario Internacional de Jesús Salvador y Madre María
- Santuario de Jasna Góra
- Santuario Internacional de los Mártires de Corea
- Santa Casa de Loreto
- Santísima Virgen del Santo Rosario
- Santuario Internacional Nuestra Señora de Knock
- Santísima Virgen del Rosario
- Nuestra Señora Reina de la Paz
- Nuestra Señora de Guadalupe
- Nuestra Señora de Lourdes.



300 ano depois

Bom dia!

Foi apresentado esta segunda-feira o manuscrito original da ‘Clavis Prophetarum’ (‘A Chave dos Profetas’), a “obra maior” do Padre António Vieira (1608-1697). Dado como desaparecido, o documento com 300 anos foi descoberto por Ana Travassos Valdez na Biblioteca da Universidade Pontifícia Gregoriana, em Roma, como contou na apresentação do manuscrito, esta segunda-feira.

A guerra na Ucrânia continua na atenção do Papa. Esta segunda-feira alertou para os milhões de refugiados e deslocados, numa mensagem dirigida à Comissão Internacional Católica para as Migrações e divulgada pelo Vaticano.

“Agradeço-vos, em particular, pelo compromisso alargado de ajudar as Igrejas na resposta aos desafios ligados à deslocação em massa, provocada pelo conflito na Ucrânia. Trata-se do maior movimento de deslocados que aconteceu na Europa desde a II Guerra Mundial [1939-1945]”, escreveu Francisco.

Esta segunda-feira, o padre Luís Marinho, assistente nacional do Corpo Nacional de Escutas (CNE) apresentou no programa Ecclesia o projeto “Entre Linhas”, que pretende “capacitar o CNE e os seus dirigentes para acompanharem crianças e jovens no seu desenvolvimento integral”, nomeadamente na dimensão afetiva. 

Na agenda desta terça-feira, o destaque vai para o encerramento do mês de maio, com procissões marianas em muitas localidades, nomeadamente na cidade do Porto, e para a apresentação da obra “O Catolicismo, Portugal e a Europa – Uma relação criativa”, de D. Manuel Clemente, cardeal-patriarca de Lisboa, na sede da Universidade Católica Portuguesa.

Votos de uma ótima jornada!

Paulo Rocha

 

 

 


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segunda-feira, 30 de maio de 2022

5 activistas que comprendieron que «el feminismo destruye a la mujer» y lo cambiaron por la fe

Tras años de militancia feminista, hoy declaran que el feminismo se alimenta de odio


Feministas gritan con pañuelos verde pro-aborto tapándoles los ojos
El feminismo más ideologizado combina la agresividad y cierta ceguera a la realidad - las que abandonan esta ideología señalan sus errores

José María Carrera

¿Podría darse la paradoja de que, usando la defensa de la mujer como bandera, el feminismo pretenda destruirla? No son pocas ni desconocidas las mujeres que, habiendo participado de esta corriente, son conscientes de que la respuesta es, en muchos casos, afirmativa.

Algunas de ellas, tras años militando en un movimiento que encuentran "marcado por el odio" acaban descubriendo en la fe y en la Iglesia una verdadera defensa de la dignidad de la mujer. Otras creen que cierto feminismo es compatible con el catolicismo. Y otras, simplemente, se dedican a combatir las mentiras que un día dominaron su vida.

Destacamos 5 casos de mujeres que han huido espantadas del feminismo . Algunas de ellas repasan las grandes mentiras que les prometió esta ideología. Otras han estudiado sus oscuros orígenes.

1º Yohana Rodríguez: "el feminismo te mete ideas que no tienen nada que ver con la dignidad de la mujer"

Una de ellas es la conversa mexicana Johana Rodríguez. En su cuenta de Twitter (@Montse_Tradis) ha explicado el proceso que le llevó desde considerarse "la salvadora de las mujeres" promulgando el aborto a definirse como "una católica en búsqueda de santidad" y "orgullosamente provida y profamilia". A través de  esta red social acostumbra a batallar contra el feminismo y desvelar no pocos de sus engaños.  

"Yo empecé con ideas del feminismo en el 2015 más o menos cuando tenía 15 años. Pero apenas recuerdo que se escuchaba en México, no era tan popular como ahora y sí te lo mostraban como un gran movimiento ante la violencia que la mujer vive en las calles o en casa", relata.

Desde entonces, comenzó a leer a relevantes autoras y mujeres feministas y a considerarse como tantas otras "la salvadora de las mujeres oprimidas". Pero pronto descubrió que "una vez dices sí al feminismo, te va metiendo ideas" que, en muchos casos, nada tienen que ver con la supuesta opresión de la mujer.

Por ejemplo, relativas a la Iglesia y la moral cristiana. "¿Por qué las mujeres no pueden ser sacerdotes? ¿Por qué debo esperar hasta que me case para tener relaciones? ¿Por qué no al aborto?", se preguntaba. No tardó en asumir que la Iglesia era una de las grandes responsables de esta supuesta opresión a la mujer y abandonó su fe.  

"Ahora sí me sentía libre. Podía hacer lo que quisiera, pensar como fuera, así que empecé a difundir mucho la liberación sexual femenina. Tenía la idea de que la Iglesia no quería dejarte vivir tu sexualidad como forma de control y me puse a hablar abiertamente sobre los beneficios de la masturbación", relata.

Comenzó a "apoyar el aborto" pese a que "sabía que seguía matando una vida" y que nunca negó "que hay vida desde la fecundación". 

Durante los momentos álgidos de su militancia, Yohana sufrió una depresión acrecentada por el mismo feminismo. "Hallaba consuelo ahí, pero duraba poco porque a fin de cuentas, te consuelan desgracia con desgracia. No hay una esperanza real. Es como si quieres ver cuál es la mujer más violenta e ir por más", relata.

Tardó dos años en superar la depresión gracias a la terapia de una psicóloga católica. "Aunque me costó mucho, me recordó mi valor al ser hija de Dios. Sin duda, cuando tienes amor, tienes para dar de sobra".

Hoy, se muestra convencida de que "no se puede ser feminista y católica, porque el feminismo solo te separa de tu fe. Esa independencia barata que te vende el feminismo es aquella con la que, en realidad, te controla, sin casarse, sin hijos y abortando ante la primera que tus planes laborales se vean afectados. Ahora soy orgullosamente provida y profamilia", concluye.

2º María Claudia: feminismo agotador, vacío Nueva Era...

María Claudia, de Colombia, era una destacada diseñadora de moda y feminista que recuerda asumir de forma acrítica los grandes clichés y posicionamientos de esta ideología.

La joven, que no recibió ninguna formación religiosa desde su infancia, "no era creyente". De hecho, "era contraria a todo lo que tuviera que ver con la Iglesia" y "el aborto y la eutanasia" no solo eran "el pan de cada día" sino "lo normal, lo que tiene que ser".

A los 27 años, recuerda que "necesitaba un milagro para cambiar de vida". No solo estaba enferma, también "tenía el alma agotada, mucha tristeza y el corazón roto". Durante años se refugió en el alcohol y en la Nueva Era, especialmente en el reiki, el yoga, la meditación trascendental y la programación neurolingüística, buscando desesperadamente el amor y llenar su vacío interior.

Una Semana Santa, por casualidad, asistió a la predicación de un sacerdote sobre el perdón y la reconciliación. "Escuché por primera vez un sermón sobre la confesión en términos que yo entendí. Habló de sanación, de curación… Y cuando lo escuché, pensé: `Yo necesito eso´".

No tardó en acudir a un miembro de los Franciscanos Renovados, Fray Carmelo, para recibir la confesión, sumida "en la más profunda miseria". Quedó sorprendida cuando, tras decirle lo que ella consideraba las "estupideces" que cometió en su vida, el sacerdote "tuvo el don de ver los pecados". "Me dijo lo que realmente debía decirle. Fueron casi dos horas de confesión, llorando hasta que me encontré con el Señor y le dije: `¿Qué quieres de mi´?".

A partir de la mañana siguiente, María Claudia comenzó a asistir a misa cada día. "Todo era un mundo absolutamente nuevo, nunca había practicado ni tenía ningún familiar católico practicante… No entendía nada", relata.

Sabía que necesitaba formación para corresponder "la infinita generosidad que tuvo el Señor", y casi de inmediato se matriculó en los estudios de Teología en la facultad de los frailes dominicos.

Nueve años después, prepara su doctorado en Teología Moral en España sobre "la ternura del Señor", y se muestra convencida de que esta disciplina ha sido "el mejor camino" para encontrar el amor de Dios. Explica que, tras vivir el "odio" y la "fealdad" propios del entorno feminista, ha encontrado la paz. "Hoy vivo con una sonrisa en la cara, porque estoy enamorada de Dios", concluye.

3º Sue Elen Browder: pionera de Cosmopolitan, el aborto la cambió

El de Sue Elen Browder ha sido otro de los casos más sonados de cómo una mujer "liberada" con un peso de gran relevancia pública, se desengañó de los postulados feministas y los cambió por la cruz, la vida y la felicidad.

Como escribimos en Religión en Libertad, Browder fue una de las pioneras de la revista mundialmente conocida Cosmopolitan, donde asumió como ideología el feminismo abortista. Allí, difundía con frecuencia que la mujer no debe ser un objeto sexual, pero al mismo tiempo afirmaba que esta tenía que estar dispuesta a ser seductora y buscar como objetivo el sexo con muchos hombres. Una consigna distinta a la que marcaba su vida privada, casada y madre de varios hijos.

Abrumados por la escasez económica, Sue Ellen optó por abortar a su tercer hijo. "Después de todo era mi derecho como mujer liberada, parecía una salida fácil en una situación imposible", diría más tarde.

"Después de mi aborto, de alguna manera, la historia en mi interior cambió", escribe. "En ese momento clave de nuestra vida, cuando más necesitábamos la libertad que nace sólo de la esperanza y la confianza en Dios, Walter y yo sucumbimos a un miedo que encoge la mente". La "libertad de elegir" no les liberó.

Su marido abrió el camino en la búsqueda espiritual de la familia cuando expresó su deseo de "conocer la realidad de Dios" y le propuso a Sue Ellen buscarla en la Iglesia Católica. "No pienso unirme a esa iglesia vieja y patriarcal", respondió ella. Pero sí dio el paso de empezar a leer sobre historia de la Iglesia.

"Cuando hablamos con nuestro primer cura, nos dijo que leyéramos el Catecismo. Cuando lo conseguí, me lo leí entero en 3 días. No pude dejarlo. Me dije: “Esto es lo que he estado buscando toda la vida. Era la Verdad", declararía más adelante.

"De repente, vi que vivir en la plenitud y gozo de la fe católica, seguir el camino de Cristo, es estar unido en amor con toda la humanidad: amigos y enemigos, ricos y pobres, santos y pecadores, desde el billonario más poderoso al niño o niña más débil en el útero", escribe Browder.

Browder se hizo católica con 57 años. "No fue hasta después que me hice católica que empecé a revisar lo que habíamos hecho en Cosmopolitan. Muchas de las historias que escribimos sobre mujeres en esa revista, eran de mujeres que no existen. Sólo después de hacerme católica, revisando esa cultura y viendo el daño que le ha hecho la revolución sexual, me di cuenta de que tenía que limpiarme de eso".

"Cuando Walter y yo recibimos a Dios en nuestros labios por primera vez, supe en las profundidades de mi corazón, tras toda mi búsqueda, que había encontrado al fin la Verdad que me prometía hacerme libre", subrayó.

Sue Ellen Browder.

4º Sara Winter, la ex-FEMEN brasileña activista en redes

Con toda probabilidad, el de Sara Winter es el caso más conocido en todo el mundo de abandono del feminismo ideologizado. Fue una de las máximas representantes y fundadoras de FEMEN en Brasil, una organización conocida por sus agresivas consignas y activismo violento y en muchas ocasiones blasfemo.

La vida de Winter no fue precisamente fácil. Su hermano, que formaba parte de las favelas y grupos de narcotráfico, pasó años agrediendo a su familia hasta que ella decidió hacerle frente y amenazó con llamar a la policía. Este apuntó a su hermana con una pistola y le amenazó con matarla de no irse de su propio hogar.

Con solo 16 años, Winter se vio sola, sin recursos y obligada a prostituirse para poder malvivir entre cuatro paredes. Fue entonces, "destruida y traumada", cuando el movimiento feminista "apareció como una salvación".

Los mensajes de "empoderamiento, independencia y liberación" calaron en ella con facilidad, y luchar contra todo aquello que había destruido su adolescencia y juventud la convertirían en una de las más comprometidas y agresivas feministas de los últimos años.

Sin embargo, los diez años que militó en FEMEN le hicieron conocer profundamente esta ideología. "Vi que no tenía nada que ver con la ayuda a mujeres vulnerables. El movimiento feminista es una ideología que tiene como premisa la teoría de la lucha de clases para tomar el poder de forma violenta, que tiene como fin último destruir la naturaleza de la mujer", sentencia.

Como el caso de Sue Ellen, sería el aborto que reivindica el feminismo el que precisamente le haría abandonar esta corriente y luchar contra ella.

"Tenía 22 años cuando quedé embarazada. Mis amigas feministas me regalaron 4 pastillas de misoprostol y seguí las directrices de la OMS para hacer un aborto seguro", explica. Pero, como en miles  de casos, tampoco el suyo fue seguro… ni liberador.

"Pasé horas insoportables de trabajo de parto sufrimiento y remordimiento para, al final de todo, mirar en el inodoro y no ver un coagulo de sangre, sino a mi hijo. No sentí empoderamiento, sentí arrepentimiento", relata.

Y llegó el síndrome posaborto: "Durante 6 meses -los peores de mi vida- sufrí el síndrome, escuchaba llantos de bebés donde no los había, tenía pesadillas horribles, no podía ver a bebés con sus madres, lloraba y lloraba y empecé a automutilarme porque yo me odiaba. Pensaba en el suicidio, tenía depresión, ansiedad y pánico".  

Uno de las consecuencias del "aborto seguro" fue una peritonitis aguda, que en su caso, estuvo a punto de terminar con su vida.

"Llamé a mis amigas feministas para llevarme al hospital y me dejaron ahí, a punto de morir. Solo me ayudó un vecino que era católico y sentí que el feminismo me dejó para morir y la Iglesia me salvó. Sentí el deseo natural de volver a casa", relata. Poco después tuvo su "segunda oportunidad" al quedar nuevamente embarazada y con su nacimiento, comenzó el regreso de Winter a la Iglesia en la que había sido educada.

Hoy, se dedica a desvelar las grandes mentiras con las que el feminismo embauca a sus militantes, como lo hizo con ella un día. Por eso es especialmente relevante su convencimiento no solo de la maldad del feminismo, sino de que este "se ha diseñado para destruir a la mujer y al cristianismo".

"Estudiando historia de la Iglesia ves que es obvio que la dignidad de la mujer pasa a existir con la difusión del cristianismo en Europa. Cuando empieza a difundirse, la mujer empieza a ser tratada con dignidad. En el catecismo, la Palabra revelada y el magisterio de la Iglesia está escrito como la Iglesia ama, quiere y respeta la dignidad de la mujer, y el feminismo hace exactamente lo contrario: percibiendo que el cristianismo eleva a la mujer en su dignidad, necesita destruirlo para destruir a la mujer, porque si la mujer está bien, no tiene por qué haber feminismo, pero si está destruida, viene como un impostor que les dice que las va a reconstruir".

En este vídeo puedes escuchar los profundos motivos teológicos de Sarah Winter por los que el feminismo lleva a la destrucción social y moral de la mujer.

5º Andrea Guachalla: alimentar con odio la ideología feminista

Antes de su conversión, Andrea Guachalla pasó gran parte de su vida en la más agresiva militancia feminista, como plasmó en su artículo Confesiones de una exfeminista.

En el mismo, relató que su vida como feminista se reducía a "una carrera en contra de los hombres y una vida llena de odio" a los hombres, a las mujeres y a la familia.

-Odiaba a los hombres: Según la narrativa feminista, todas las mujeres son victimizadas por los hombres. Como buena feminista, lo creía todo, incluso si no se me presentaban hechos. Podría haber dicho objetivamente que muchos de los hombres que conocía eran amables, admiraban a las mujeres y las protegían. Pero eso iba en contra de la narrativa feminista. Odiaba a los hombres, incluso si nunca me habían hecho daño. No me importaba conocerlos como individuos, los odiaba como grupo colectivo y mi odio no se detenía ahí.

-También odiaba a las mujeres: Todas aquellas mujeres que pensaban que los hombres y las mujeres tenían un diseño diferente, un rol diferente, y que pensaban que casarse era algo deseable, y ser madre el mejor trabajo que uno podría tener… Las odiaba. Odiaba a las mujeres que eran femeninas, a las que deseaban casarse, a las que deseaban tener hijos más de lo que deseaban tener una carrera.

-Odiaba la belleza: El feminismo dice que la belleza es una construcción social, que la belleza es relativa. Además, acorde al feminismo, es una herramienta del patriarcado para oprimir a las mujeres y hacer que se centren en estándares de belleza inalcanzables. Como resultado, yo ponía menor de los esfuerzos en mi vestimenta, me negaba a cepillarme el cabello o usar cualquier tipo de maquillaje. Y, por supuesto, hablaba mal de cualquier chica que tuviera una visión diferente de la belleza que la mía. Aunque mi única opinión vaga sobre el tema era: “La belleza no existe”.

-Odiaba a las familias: Mi odio por las mujeres se traducía en mi odio hacia las familias en general. No podía entender cómo una mujer desearía casarse y tener hijos, convirtiéndose así en esclava de su familia, en lugar de estudiar y convertirse en una trabajadora exitosa y reconocida, convirtiéndose así en esclava de la academia y el campo laboral. “Familia” me parecía, el lugar donde las mujeres son explotadas y se abstienen de perseguir sus “verdaderos” sueños. La consecuencia lógica fue que despreciaba a la familia nuclear. Ni por un momento consideré que servir a tu familia y ser ama de casa es el verdadero privilegio.



Folha Paroquial de S. José_S. João Baptista de 29 de maio de 2022 - Domingo da Ascensão do Senhor




Um Colégio Cardinalício dos cinco continentes

Bom dia e boa semana para si que nos acompanha, nesta reta final de maio,

A festa do consistório vai voltar ao Vaticano, quase dois anos depois, com a criação de 21 cardeais, anunciada este domingo pelo Papa. Entre os 16 futuros eleitores, há quatro lusófonos: dois arcebispos do Brasil, o arcebispo de Goa e Damão e o arcebispo de Díli (Timor-Leste). A celebração está marcada para 27 de agosto.

Ontem foi Dia Mundial das Comunicações Sociais, a que dedicamos a entrevista conjunta Ecclesia/Renascença, com Isabel Figueiredo, diretora do nosso secretariado, e o programa Ecclesia na Antena 1 da rádio pública, com os presidentes da AIIC e da ARIC.

Das Comunicações Sociais, chegam ainda notícias dos Açores, ligadas à JMJ 2023, que esteve no centro da mais recente emissão do programa ‘70x7’ (RTP2), sobre a peregrinação dos símbolos da Jornada Mundial da Juventude.

O programa ECCLESIA regressa hoje à RTP2, pelas 15h00, com a presença do padre Luís Marinho, assistente nacional do CNE – Escutismo Católico, que começa a sua celebração dos seus 100 anos em Portugal.

Despeço-me com votos de boas notícias, sempre,

Octávio Carmo

 


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domingo, 29 de maio de 2022

La Iglesia Ortodoxa Ucraniana del metropolita Onofre decide desvincularse del Patriarcado de Moscú

Sínodo de la Iglesia Ortodoxa Ucraniana del patriarca Onofre.
La decisión del sínodo de la Iglesia Ortodoxa ucraniana que permanecía vinculada al Patriarca de Moscú ahonda las divergencias entre los ortodoxos rusos y los demás.

ReL

TAGS: Ortodoxos Iglesia en Ucrania

El sínodo de obispos de la Iglesia Ortodoxa Ucraniana, bajo la autoridad del metropolita Onofre, decidió este viernes romper sus vínculos con el Patriarcado de Moscú y declarar su autonomía. Esta comunidad, que agrupa a buena parte de los ortodoxos ucranianos, sobre todo en el Este del país, se había mantenido bajo el Patriarca Kiril de Moscú cuando en 2018 surgió la Iglesia de Ucrania del metropolita Epifanio, con el reconocimiento y apoyo del Patriarca de Constantinopla.

Su vinculación a la Iglesia Rusa no impidió a Onofre condenar la invasión de su país el 24 de febreo, invitando a orar por la resistencia y  apelando "al presidente de Rusia" para que detuviese una "guerra fraticida": "Los pueblos ucraniano y ruso salieron de la pila bautismal del Dniéper, y la guerra entre estos pueblos es una repetición del pecado de Caín". También apeló al clero ortodoxo, a "ambos lados" del conflicto armado, "para que se vean como hermanos y colaboren en el camino de una tregua".

El metropolita Onofre, cabeza de la ahora autocéfala Iglesia Ortodoxa Ucraniana.

El metropolita Onofre, cabeza de la ahora autónoma Iglesia Ortodoxa Ucraniana.

Sin embargo, el apoyo del Patriarca Kiril a su gobierno, que considera la intervención rusa como de apoyo a la población del Donbás, ha sido finalmente decisiva para que el sínodo de la Iglesia Ortodoxa Ucraniana, después de 3 meses completos de guerra, haya optado por su "plena independencia" respecto al Patriarcado de Moscú.

"Condenamos la guerra como una violación del mandamiento de 'No matarás', y expresamos nuestra condolencia a todos los afectados por la guerra", dice el Sínodo: "Llamamos también a las autoridades ucranianas y a la Federación Rusa a continuar el proceso de negociación y  a buscar una solución fuerte y racional que pueda detener el baño de sangre".

Los mandatarios ortodoxos que aún seguían bajo dependencia religiosa rusa expresan también su "desacuerdo" con "la posición del Patriarca de Moscú sobre la guerra en Ucrania", por lo que han aprobado "modificaciones al estatuto administrativo de la Iglesia Ortodoxa Ucraniana en el sentido de una plena autonomía e independencia".

Dialogar con los otros ortodoxos de Ucrania

En cuanto a su relación con sus vecinos de la otra gran iglesia ortodoxa en el país, la Iglesia de Ucrania (del metropolita Epifanio de Kiev, reconocida por el Patriarcado de Constantinopla y el de Alejandría), se abre la posibilidad de un diálogo, pero para ello piden "que los representantes de la Iglesia de Ucrania deben dejar de ocupar iglesias y apropiarse de parroquias de la Iglesia Ortodoxa Ucraniana".

También señalan que la Iglesia de Ucrania de Epifanio “debe darse cuenta de que su estatus normal, tal como definen sus estatutos, no es de hecho de autocefalia, y es significativamente inferior". 

Vista general del sínodo de la Iglesia Ortodoxa Ucraniana.

En cambio, como destaca el Orthodox Times, en el post en Telegram que ha publicado Nikolai Danilevich, vicepresidente de relaciones eclesiásticas extranjeras de Onofre, se anuncia sobre la Iglesia Ortodoxa Ucraniana: "Toda referencia a la conexión de la Iglesia con el Patriarcado de Moscú se ha retirado. De hecho, en contenido, el estatuto de la Iglesia Ortodoxa Ucraniana es ahora el de una iglesia autocéfala"

Los ortodoxos ucranianos ligados a Moscú tenían sus propios sínodos regionales desde 1992 y en los últimos años habían ganado algo más de autonomía, pero la guerra lo ha cambiado todo. En la decisión final ha pesado mucho la opinión de los fieles, que ha sido solicitada y tenida en cuenta por los obispos para definir su posición.

Durante años, muchos ortodoxos de Ucrania habían intentado no significarse en el conflicto entre ambas obediencias (la de Moscú y la de Kiev), aunque Kiev iba ganando cada vez más adeptos, mientras que la opción "sólo soy ortodoxo" y la del Patriarcado de Moscú iba disminuyendo, sobre todo a partir de la ocupación de Crimea por parte de las tropas rusas en 2014.

Evolución de las iglesias ortodoxas en Ucrania de 2000 a 2018

Cristianos en Ucrania: muchos cerca de Polonia; menos cerca de Rusia

Ucrania es uno de los países de Europa en los que el cristianismo ha crecido en el siglo XXI. En el año 2000, se declaraban creyentes un 60%; en 2016, lo hacía un 70%. Parece que la mitad de los que titubeaban entre creer y no creer (un 22% en el 2000) se fueron haciendo creyentes, porque en 2016 eran sólo un 10%.

Un sondeo del centro Razumkov (a más de 2.000 personas en 2016) da resultados de religiosidad por regiones: en el Oeste, con Leópolis como capital, la zona con más católicos y más influencia polaca, que perteneció al antiguo Imperio Austro-Húngaro, se declaran creyentes el 91%. En esa región, el 30% de la población es grecocatólica (el 60% en la provincia de Leópolis).

En cambio, en el Este, en el Dombás, con ciudades industriales creadas de la nada por los soviéticos y pobladas por trabajadores traídos de Rusia, los creyentes son sólo un 57% y los grecocatólicos casi indetectables.

La realidad es que la población ucraniana es mucho más religiosa que la rusa, y el Patriarcado de Moscú tenía muchas de sus parroquias más vivas y numerosas en territorio ucraniano. Ahora pierde esas parroquias así como muchos monasterios, entre ellos el más antiguo, el Monasterio de las Grutas de Kiev.

Reacción de Moscú: como si no hubiera pasado nada

El metropolita Hilarión, responsable de relaciones exteriores del Patriarcado de Moscú, publicó una nota quitando toda importancia a la declaración de "independencia" del sínodo de la Iglesia Ortodoxa Ucraniana, asegurando que ya era independiente.

"Por las decisiones de ayer, la Iglesia Ortodoxa Ucraniana testificó una vez más que es completamente autónoma, que el centro de su iglesia no está ubicado en Moscú, sino en Kiev, que no depende de Moscú ni administrativa ni financieramente ni de ninguna otra manera.", aseguró Hilarión.

"Se preserva la unidad entre la Iglesia Ortodoxa Ucraniana y la Iglesia Ortodoxa Rusa, así como con otras Iglesias Ortodoxas Locales que no han tomado el camino del cisma. Continuaremos fortaleciendo esta unidad", añade. 

Desde hace un par de años, Moscú considera cismáticos a la Iglesia Ucraniana de Epifanio y a quien la reconozca, incluyendo los Patriarcados de Constantinopla y Alejandría y la Iglesia autocéfala de Grecia.

Hilarión aprovechó para referirse a los casos de parroquias que en el contexto de la guerra son confiscadas, cerradas u ocupadas por las autoridades ucranianas o fieles de la Iglesia Ucraniana: "Los cismáticos están tratando de quitarle sus propiedades, las autoridades ucranianas han organizado la persecución de la Iglesia Ortodoxa Ucraniana, está prohibida en varias áreas, sus iglesias están cerradas, asaltantes confiscan iglesias". Y añade, protestando: "Están tratando de privar a la Iglesia Ortodoxa Ucraniana de su nombre legal, para cambiarle el nombre a Iglesia Rusa en Ucrania".



Para um espiritualidade da condição provisória

O cardeal José Tolentino Mendonça fez este sábado o «elogio do não saber» e afirmou a importância da espiritualidade da condição provisória, durante a 16ª Jornada da Pastoral da Cultura.

Deixo algumas frases que servem para guiar o nosso dia e para a nossa vida:

“Viver a espiritualidade do precário, do provisório não é viver uma espiritualidade em tom menor, não é viver uma espiritualidade diminuída, insuficiente; pelo contrário, é viver intensamente a espiritualidade, é viver o coração da vida espiritual, porque também aqui a experiência do menos é abertura ao mais”.

“Aceitar o provisório é aceitar que o que vivemos é uma parábola, é fazer brotar uma imagem, um «como se», partir não de coisas garantidas mas de uma confiança, partir do provisório como lugar de verdade para viver a espiritualidade”.

“Percebemos que o não saber é um desafio a uma viagem, onde podemos reconhecer o mistério, aquilo que não se revela. Reconhecer é ouvir, cartografar, mapear, e esse é um processo dinâmico e importante na espiritualidade. Reconhecer significa também a gratidão. A espiritualidade do provisório mostra o dom, algo interior, e que o não saber não é uma ausência, mas algo que fala”.

“A experiência espiritual é uma experiência de abertura, transfronteiriça, onde aprendemos a não temer o vazio, a indeterminação. A atitude espiritual mais importante é a atenção, como disponibilidade para se deixar tocar e surpreender, pelo que é a epifania do ser, pela capacidade da realidade se tornar significativa”.

“Só um olhar sem defesas consegue apreender a verdadeira presença”.

“Tempos de passar da pertença, da presa, a uma abertura, ao não possuir, ao não ter, ao habitar o transitório e o precário, que é o que nos permite habitar a espantosa realidade das coisas; não viver de conceitos e ideias, não construir prisões e armadilhas, mas viver no trânsito e viver a viagem como o lugar da experiência”.

“Não vivemos de respostas mas de perguntas. Vivemos no enigma, na fronteira, e numa espiritualidade do precário percebemos que o enigma não é um limite, o mistério não é um obstáculo, mas uma possibilidade”.

Tenha um excelente dia!

Lígia Silveira

 


www.agencia.ecclesia.pt

      



sábado, 28 de maio de 2022

Sus tiras de humor escondían un «infierno interior» que estalló al toparse con la Presencia Real

El dibujante Yves Guézou vivía sojuzgado por la paranoia y la agorafobia


Yves Guézou.
El dibujant Yves Guézou se encontró con Dios en la soledad de una iglesia un 31 de diciembre. Foto: Captura KTO.

C.L.

Yves Ghézou es un dibujante de tiras cómicas que ha publicado en importantes medios de comunicación franceses: generalistas como Le Point, del motor como L'Auto Journal, de negocios como Entreprise et Carrières o católicos como Famille Chrétienne. Es ilustrador publicitario y diseña también portadas de libros, además de escribir los suyos propios, ya una decena, sobre todo centrados en la fe

Portada de 'Todo lo que siempre quiso saber sobre los católicos y nunca se atrevió a preguntar'.

Inspirándose en la célebre película de Woody Allen de 1972, Guézou tituló uno de sus libros 'Todo lo que siempre quiso saber sobre los católicos y nunca se atrevió a preguntar'. En la cubierta, una ilustración en la que un autobús de peregrinos de la parroquia de San Lucas se despeña por un barranco. Mientras los pasajeros cantan 'Cerca de Ti, Señor', el párroco se dirige a ellos con espíritu cristiano: "Queridos hermanos, alegrémonos de esta situación porque Philippe, nuestro conductor, ¡acaba de confesarme que por primera vez tiene ganas de rezar!"

Yves empezó a dibujar siendo muy joven, siempre con el humor como divisa, pero también como pantalla que ocultaba "un sufrimiento extremo": "Nadie podía imaginar lo que yo vivía por dentro, pero era un infierno permanente". 

¿Cuál era el origen de ese infierno?

Aunque nacido en 1960 en Saint-Cloud, a orillas del Sena, se considera bretón de adopción, porque desde que tiene memoria ha veraneado cerca de Brest. Desde muy pequeño empezó a hacer dibujos con los que hacer reír a los demás, pero en la adolescencia "ese humor gratuito y sencillo se convirtió en una escapatoria", explica. Tenía "una gran sed de absoluto", pero erró en el lugar donde saciarla.

Esoterismo y paranoia

Aunque había sido bautizado y confirmado, no vivía la fe. Para él "Dios era una noción intelectual que no afectaba a mi vida cotidiana". Se refugió en la gnosis, la alquimia, la astrología, la numerología... Su esoterismo no era práctico, sino intelectual. No llevaba a cabo prácticas esotéricas, pero en el nivel del conocimiento sí se veía a sí mismo "en una posición de superioridad, poseedor de una sabiduría mayor que la de sus contemporáneos, miembro de una élite".

Esto, unido a su timidez ("disimulada por mi propensión a ir de gracioso por la vida") y a la ansiedad por no encontrar sentido a la existencia, acabó por provocarle un trastorno paranoide: "Tenía la sensación de que los demás me leían el pensamiento y se reían de mí". Cada vez que se cruzaba con alguien que sonreía o reía, pensaba que era objeto de sus burlas: "Ya no podía tener relaciones normales. Caí en la agorafobia. El dibujo era mi única tabla de salvación. Reírme de todo me permitía sobrevivir a mis angustias y mis ideas suicidas".

Viñeta de Guézou.

"Tú siempre me has considerado demasiado pesada y, la verdad, tú me pareces demasiado ligero. ¿Sabes, Isidoro? No creo que todos estos artificios sirvan para acercarnos. Esa necesidad de disfrazarte demuestra que, para ti, en el fondo, somos muy diferentes". Guézou titula esta viñeta 'Solo se ve bien con el corazón'.

Por eso, aunque había comenzado su vida profesional abriendo una pequeña escuela de negocios, se fue orientando cada vez más hacia la vida artística. Pero todo era una impostura: sus historietas divertían a otros, pero su depresión no conocía descanso. Se aisló de familia y amigos. Cada persona era un enemigo e incluso la simple relación establecida al ir a comprar el pan se le hacía insoportable.

Yves sabía que el gran maestro que le había inspirado profesionalmente, Chaval (Yvan Francis Le Louarn, 1915-1968) se había quitado la vida: "Era la confirmación de mi destino", explica, y solo le alejaba de seguir ese camino el dolor que infligiría a sus padres.

El 'destino' no se confirma

¿Qué salvó a Yves? Dios primero y su esposa Ligia después, aunque ambos encuentros van ligados.

Él había llegado a la conclusión de que no podía salir solo del "agujero profundo" en el que estaba: "En el fondo de mi ser, y sin saber muy bien por qué, sentía que solo Dios podía sacarme".

Y un 31 de diciembre 1988 entró en la impresionante iglesia de Saint Gervais, cercana a su trabajo en París, a pedírselo

El testimonio de Yves al canal católico KTO.

Era la primera oración real de su vida a ese Dios al que creía emular en su soberbia gnóstica. Estaba solo en el templo y fuera se escuchaba el jaleo de la gente celebrando el Año Nuevo: "Allí, por primera vez, imploré a Dios desde mis entrañas, a ese Dios que creía lejano e inaccesible. Le dije: 'Si puedes intervenir en la vida de una persona, por favor, hazlo en la mía, porque yo me rindo'".

No pasó nada, dice, pero al cabo de unos días volvió al mismo sitio. Esta vez había unos monjes y monjas orando en adoración ante el Santísimo Sacramento. Él imitó su gesto creyendo estar ante algo "simbólico", pero fue justo ese día, al cabo de unos minutos, cuando comprendió "lo que los católicos denominan Presencia Real": "Sentí la presencia de Cristo. Las palabras son demasiado limitadas para expresar lo que experimenté. Caí al suelo llorando, pero eran lágrimas de alegría, porque sentía un Amor inconcebible que me miraba con misericordia, unida a una 'clarividencia' respecto a todas mis estupideces y errores".

Yves estuvo unos veinte minutos tirado en el suelo, llorando, viviendo esa "mirada de amor" que le estaba cambiando por dentro. 

"Yo deseaba que aquello no acabase nunca", recuerda, "pero... ¡se acabó! Entonces le dije a Dios: 'Has escuchado mi oración más allá de cuanto habría podido imaginar. Señor, te entrego mi vida. Si quieres, seré sacerdote, monje, lo que quieras".

Ligia

Pero lo que Dios quería no era eso. Los religiosos que estaban en oración en Saint Gervais pertenecían a las Fraternidades Monásticas de Jerusalén, fundadas en 1975 por el hermano Pierre Marie Delfieux (1934-2013) con los auspicios del cardenal François Marty, arzobispo de París.

Al cabo de unos días, fue a hablar con ellos para explicarles su transformación y su deseo de cambiar de vida. Una vez allí, preso aún de sus tendencias agorafóbicas, le entró pánico y escapó. Ya huía con su moto, cuando un semáforo en rojo le obligó a parar. Una voz interior le dijo: "Yves, si no vas ahora, no irás nunca". Dio media vuelta, entró de nuevo en la sala parroquial y venciendo todas sus inercias se puso a hablar con uno de los fieles.

Fue entonces cuando entró Ligia, y el flechazo fue inmediato. Ella, socióloga brasileña, venía también de una conversión, menos traumática que la de Yves pero no menos intensa. "El Señor tomó la iniciativa", recuerda, "atrayéndome poco a poco con la bella liturgia de Saint Gervais, a donde alguien me invitó a ir por primera vez. Fue el inicio de mi camino. Esa liturgia [que incluye música bizantina e himnos de origen protestante] me tocó profundamente, sentí algo sobrenatural. Yo vivía encerrada en mí misma, sin dejar que Dios entrase en mi corazón".

Portada de 'Breizh, Brasil!'

'Breizh, Brasil!' es la obra en la que Yves y Ligia han contado su conversión y su recorrido juntos por la vida desde hace 32 años.

Se conocieron, y al cabo de pocos meses se casaron. Ante el altar hicieron una promesa a Dios: "Hasta ahora nosotros lo hemos estropeado todo. A partir de ahora Tú vas a llevar las riendas de nuestra vida". Poco tiempo después se fueron como voluntarios a Brasil con la asociación Point Coeur, a ayudar y evangelizar a los niños de la calle y de las favelas.

Dibujar, no 'contra', sino 'al servicio de'

Yves dejó de dibujar: "Ya no necesitaba encontrar un sentido a mi vida en el humor, porque lo había encontrado en Dios". Al cabo de un tiempo adoptaron dos niños y regresaron a Francia. Buscando el sol, se instalaron en el sur, entre los viñedos de la occitana y taurina Nîmes.

A Yves le volvió a tentar el deseo de volver a sus historias y viñetas, pero con un sentido diferente: "Quería dibujar para Dios, evangelizar, dar testimonio, pero sin caer en los clichés. Creía que la Iglesia necesitaba humor y alegría".

Viñeta de Guézou.

"Mi querido Sr. Bergeome, no querría desalentarle, pero en lo que concierne a sus gravísimos problemas pulmonares me permito abrigar ciertas dudas sobre la eficacia de su novena a Santa Alvéola". Guézou.

Volvió  a hacerlo, pero ahora casi todas sus obras tenían, y han seguido teniendo, un sentido diferente al que tenían antes de aquella noche de fin de año: "De dibujar 'contra' mi malestar, pasé  dibujar 'al servicio de'".

¿Al servicio de qué? "Mi objetivo", concreta, "es proclamar las verdades sobre el hombre, sobre su miseria, y mostrar su grandeza cuando es transformado por Cristo. El hombre se convierte en una caricatura cuando se aleja de Él y ya no vive en el amor. Mis dibujos no buscan destruir a nadie, sino denunciar piedras en las que puedo caer yo mismo. No soy más virtuoso que mis personajes".

Han desaparecido los antiguos 'enemigos'. Para Yves el humor ya no es una escapatoria: "Es ahora un medio para acercarme a los demás".