Hace 9 años que los seminaristas y sacerdotes de distintos países en Roma tienen un equipo deportivo de críquet que se pone los colores vaticanos o que juega su propia liguilla, pero ahora este deporte popular en los países de cultura británica y antiguas colonias pasa a formar parte oficialmente del equipo deportivo vaticano y su asociación, la Athletica Vaticana.
Este 26 de enero se ha firmado un acuerdo histórico, por el cual el equipo de críquet se integra en Athletica Vaticana, bajo la supervisión del Dicasterio para la cultura y la educación, al que la nueva Constitución Apostólica Praedicate Evangelium confía explícitamente el deporte.
El acuerdo fue firmado por el cardenal prefecto, José Tolentino de Mendonça, con el director del equipo de críquet, el padre Eamonn O'Higgins (irlandés de los Legionarios de Cristo y profesor de filosofía en Roma) y el presidente de Athletica Vaticana, ante la presencia de Lech Piechota, funcionario del Dicasterio que supervisó el acuerdo.
Los pioneros del equipo de críquet del Vaticano en 2013. Ahora se ha integrado oficialmente en la Athletica Vaticana, su asociación y selección deportiva.
El equipo cuenta con sacerdotes y seminaristas que estudian en diversas universidades de Roma. Proceden de India, Pakistán, Sri Lanka, Inglaterra, Irlanda y Australia, países donde este deporte tiene gran popularidad.
Los nativos italianos, más interesados en el fútbol, lo miran con extrañeza, pero la experiencia del equipo viajando en varios países es que les abre muchas puertas.
Los historiadores del deporte señalan que ya en el siglo XVIII se jugaba al críquet en el ámbito vaticano y que a principios del siglo XX competían los estudiantes de diversos colegios pontificios.
Desde 2014, los jugadores de críquet de la "selección vaticana" usaban el nombre de "Saint Peter's Team" y estuvo de gira por varios países con el nombre Tours Luz de Fe (Light of Faith). En Inglaterra jugaron ante la Reina Isabel II, y también jugaron en Argentina, Kenia, Portugal y Malta. Han sido un puente para el diálogo ecuménico e interreligioso y un gesto de ánimo en zonas muy pobres.
En el acto de firma, el cardenal de Mendonça animó a que la Athletica Vaticana siga siendo semilla de paz a través del deporte. El líder del equipo, el padre O'Higgins, confirmó que el objetivo de sus jugadores es, ante todo, el anuncio del Evangelio.
La Athletica Vaticana ya tiene equipos de atletismo, ciclismo, pádel y taekwondo, un equipo paralímpico y explora nuevos espacios como la esgrima y el baloncesto.
Pequeño reportaje de hace 2 años sobre el equipo de críquet vaticano; ahora se ha integrado en la Athlética Vaticana oficialmente.
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