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quinta-feira, 6 de julho de 2017

Greg Burke: “Navarro Valls supo cómo gestionar en el Vaticano, la revolución de internet”

Entrevistado, no esconde un cierto embarazo por tener que suceder a ‘un grande en muchos campos’

Greg Burke en la Sala de Prensa
Greg Burke En La Sala De Prensa (Foto ZENIT Cc)
(ZENIT – Ciudad del Vaticano, 6 Jul. 2017).- El día después de la muerte de Joaquín Navarro Valls, director de la Oficina de prensa de la Santa Sede durante el pontificado de san Juan Pablo II e inicio del de Benedicto XVI, ocurrida este miércoles,  ZENIT junto con la radio española COPE tuvo la oportunidad de conversar algunos instantes con Greg Burke, actual portavoz del Vaticano.
Interrogado por la periodista Eva Fernández sobre la idea de tener que suceder a una persona como Navarro Valls, Burke hablando en español no ha escondido un cierto embarazo: “Es difícil, porque la verdad es Navarro Valls era muy capaz, en muchas cosa:, como profesional, en cuanto periodista, el hecho que hablaba varios idiomas y desde el punto de vista humano. Además con las personas tenía mucho enganche. Yo era un joven que trabajaba en la revista Time y veía que mis grandes jefes que lo nombraron hombre del año estaban encantado con él, encantados”.
Señaló también que “es difícil seguir sus pasos porque ha sido revolucionario, sabía torear los intereses diversos y difíciles, incluso ser laico ha sido una ventaja pero ha enfrentado momentos difíciles siendo muy hábil y también paciente”.
Sobre el hecho que Navarro Valls haya trabajado 22 años con dos papas, etc… Burke indica: “Yo no me quedo 22 años, porque el trabajo es tanto, es diverso porque existen los nuevos medios de comunicación y las dificultades llegan durante las 24 horas. De vez en cuando digo: ‘ojalá los tiempos de Navarro sin móvil y sin internet’, claramente con otras dificultades. Él ha sido un grande en muchos campos”.
Sobre los cambios que logró en la Sala de prensa, el actual director le indicó a ZENIT: “Cambió la sala de prensa, primero porque era el primer laico en el Vaticano que asumía un puesto tan delicado. Además los tiempos cambiaban, baste pensar que en 1984 no existía el fax. Después llegó el fax y todo el resto. O sea que vivió este cambio tecnológico. No llegó a Instagram y a Twitter pero a la revolución de internet la vivió y gestionó bien”.
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