7 enero 2018
Los católicos en la India siguen sufriendo persecución y acoso. Días antes de Navidad un grupo de seminaristas fueron acosados y retenidos y su coche quemado cuando se dirigían a cantar villancicos en el estado de Madhya Pradesh. Ahora, en este mismo estado, un grupo de miembros del partido gobernante están presionando para obligar a una escuela católica a celebrar ritos hindúes.
Tal y como explica AsiaNews, el incidente se produjo en el St. Mary’s Post Graduate College de Vidisha, donde radicales hindúes del Akhil Bharatiya Vidyarthi Parishad amenazaron con represalias si no se hacían estos ritos hindúes.
El obispo local, monseñor Anthony Chirayath, obispo de Sagar, ha explicado que “estoy preocupado, porque los activistas de la extrema derecha hindú sostiene que quieren realizar una ‘pooja’ (un ritual votivo a los dioses hindúes) en nuestra institución católica. En el college no celebramos misas ni oraciones, y no permitiremos que ofrezcan ceremonias sagradas hindúes de ningún tipo”.
El incidente tuvo lugar el 30 de diciembre pasado, cuando un grupo de activistas del partido nacionalista hindú actualmente en el gobierno se presentó en el college pidiendo hablar con la administración. El P. Shaju Devassy, director, cuenta que “los hindúes querían obligar a la escuela a realizar, en el día de hoy, el Bharat Mata Aarti (personificación nacional de la India como “Diosa Madre”, representada por la diosa Durga vestida con un sari naranja y acompañada por un león)”. Ante la negativa de los católicos, “ellos se pusieron furiosos, y nos amenazaron diciendo que llevarían a término el ritual incluso con el uso de la fuerza”. “No sentimos perturbados a nivel emocional –agrega el sacerdote- y los estudiantes temen por su seguridad”.
Monseñor Chirayath denuncia que el incidente ocurrió “frente a la mirada de cantidad de policías. Varios sacerdotes de la diócesis de Sagar fueron hasta el college para brindar su apoyo a la dirección a través de la oración”.
Una cadena de enfrentamientos
Estas amenazas al instituto constituyen el cuarto episodio reciente en Madhya Pradesh. En el primero, en septiembre, los fundamentalistas acusaron falsamente a la Iglesia de llevar adelante conversiones forzadas en relación a 200 personas. Las investigaciones de la policía han demostrado que las acusaciones eran inventadas e infundadas. Después hubo una procesión de los radicales con antorchas encendidas por las calles de Sagar. Días antes de Navidad hubo una agresión a los seminaristas y sacerdotes de Satna, que estaban visitando los pueblos para brindar un concierto de cantos de Navidad. Y ahora, este incidente en el college de Vidisha.
Terroristas y ultra nacionalistas contra los católicos
Aquellos que quieren imponer la adoración de las deidades hindúes en las escuelas católicas de la India "no son nacionalistas, sino ultranacionalistas, terroristas", según ha explicado monseñor Theodore Mascarenhas, secretario general de la Conferencia de Obispos de la India (CBCI).
Se trata de una imposición “anticonstitucional, antidemocrática y viola nuestra libertad personal". A pesar de la actitud intimidatoria de estos terroristas, el obispo "agradeció al ministro del Interior, Rajnath Singh, quien intervino directamente y envió a unos 400 policías para restablecer el orden y protegernos. Algo muy malo podría pasar".
De acuerdo con monseñor Mascarenhas, el incidente en el Estado de Madhya Pradesh "es algo muy triste, muy peligroso para la India. Sobre todo porque los activistas se presentaron no con una solicitud, sino con una orden". Y recordó que “somos una institución minoritaria y tenemos todo el derecho a administrar nuestras instituciones. No pueden obligarnos a nadie a adorar a sus deidades. No nos fuercen y no queremos ser forzados". El obispo agrega "que ahora la situación está bajo control, gracias a la firme acción del ministro Singh. Pero no sabemos cuál será el futuro".
2018, un año para la armonía en la India
Sobre el futuro de la India, monseñor Mascarenhas ha publicado una declaración de los obispos, en la que espera "que el 2018 sea un año de paz y armonía, amor y hermandad, desarrollo inclusivo e integral para todos los pueblos". La nota cita el reciente ataque en el que murió un ex miembro de la casta de los "intocables" y que ha provocado protestas de cientos de miles de personas en las calles de Bombay.
“Este tipo de terrorismo es inaceptable. Este falso nacionalismo debe terminar". Es hora de que todos, concluye la nota, se unan para preservar la fraternidad tradicional, la paz y la armonía en nuestro amado país. Pedimos a los líderes de todo el espectro político que reconozcan que los grupos y las personas que propagan veneno y siembran odio van en aumento y se les alienta. La historia no perdonará a la generación actual si perdemos ese legado ganado a través del sacrificio y la sangre de nuestros luchadores por la libertad".
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